Hoy en la reunión de padres miraba mi alrededor... ya han pasado dos cursos desde que entró al cole y otros dos años en la guarde... y estamos aquí, a un año de pasar a primaria.
Mi chiquitin ya no lo es tanto. Sabe hacer tantas cosas ya... sabe expresarse, razonar, pensar por sí mismo, pensar en los demás, sabe contar, cantar, jugar, escribir, casi leer... Mi hombrecito ...
Ya sentados los padres en esas diminutas sillas, dí un vistazo rápido a su nueva aula. En un rincón, había un espacio dedicado a los dientes que se iban cayendo. Y el pulso se me ha disparado. Madre mia... ya? los dientes? tan pronto? como era eso del ratoncito Perez?
Mientras escuchaba la reunión, pensaba en los conflictos que nos pueden surgir este año, en las fiestas, los días libres, vacaciones, excursiones... y que al año que viene no podré disfrutar con él las mismas cosas. Así que me he presentado madre encargada. Espero que haya paz y gloria entre los padres ahora que ya nos conocemos mejor de los años anteriores.
Al acabar la reunión y llegar a casa, hemos debatido en la sobremesa sobre las extraescolares. No soy muy partidaria, la verdad. Me parten en dos las tardes.
Acaban a las 5, entran a la extraescolar a las 6 y salen a una hora más tarde. Me quedo alli.? Donde voy? Si lo comparo con estar en el parque es lo mismo. Aunque estés de charreta con otros padres, no estás con tu hijo, ni estás adelantando trabajo, ni descansando.
Buff, las extraescolares, en este momento , no me apetecen nada.
De entre todas, me apetece que mi hijo simplemente juegue. Pero claro está que si tiene predilección por alguna cosa, habrá que sentarse a hablar. (Estamos barajando la idea de apuntarlo a futbol porque ha insistido. )
¿Sabes ese refrán de" por donde hablas, pasas. "? Ya, peeeeeeeeero no me gustaría para nada, tener que sacrificarme los fines de semana porque hay partido. Me niego. Como actividad complementaria, si tiene tiempo, está genial.
Desde luego, y hablando en mi caso del futbol lo prefiero a que se quede en casa viendo la tele.
Este año me lo voy a tener que organizar y cuadrar al máximo. No quiero que se pierda nada que él quiera vivir. Tendré que ceder. Extraescolares...buuuuufff...
Mi chiquitin ya no lo es tanto. Sabe hacer tantas cosas ya... sabe expresarse, razonar, pensar por sí mismo, pensar en los demás, sabe contar, cantar, jugar, escribir, casi leer... Mi hombrecito ... Ya sentados los padres en esas diminutas sillas, dí un vistazo rápido a su nueva aula. En un rincón, había un espacio dedicado a los dientes que se iban cayendo. Y el pulso se me ha disparado. Madre mia... ya? los dientes? tan pronto? como era eso del ratoncito Perez?
Mientras escuchaba la reunión, pensaba en los conflictos que nos pueden surgir este año, en las fiestas, los días libres, vacaciones, excursiones... y que al año que viene no podré disfrutar con él las mismas cosas. Así que me he presentado madre encargada. Espero que haya paz y gloria entre los padres ahora que ya nos conocemos mejor de los años anteriores.
Al acabar la reunión y llegar a casa, hemos debatido en la sobremesa sobre las extraescolares. No soy muy partidaria, la verdad. Me parten en dos las tardes.
Acaban a las 5, entran a la extraescolar a las 6 y salen a una hora más tarde. Me quedo alli.? Donde voy? Si lo comparo con estar en el parque es lo mismo. Aunque estés de charreta con otros padres, no estás con tu hijo, ni estás adelantando trabajo, ni descansando.
Buff, las extraescolares, en este momento , no me apetecen nada.
De entre todas, me apetece que mi hijo simplemente juegue. Pero claro está que si tiene predilección por alguna cosa, habrá que sentarse a hablar. (Estamos barajando la idea de apuntarlo a futbol porque ha insistido. )
¿Sabes ese refrán de" por donde hablas, pasas. "? Ya, peeeeeeeeero no me gustaría para nada, tener que sacrificarme los fines de semana porque hay partido. Me niego. Como actividad complementaria, si tiene tiempo, está genial.
Desde luego, y hablando en mi caso del futbol lo prefiero a que se quede en casa viendo la tele.
Este año me lo voy a tener que organizar y cuadrar al máximo. No quiero que se pierda nada que él quiera vivir. Tendré que ceder. Extraescolares...buuuuufff...
La verdad es que lo de las extraescolares es todo un sacrificio para los padres. Yo iba a un montón y mi pobre madre siempre tenía que estar para arriba y para abajo... Pero también te digo que yo se lo agradezco un montón. Sois unas heroínas!! Besotes.
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